Las calles del municipio se transforman en un homenaje vivo al legado femenino gracias al proyecto “Callejero con nombre de mujer”. Una iniciativa que busca dar visibilidad a figuras históricas y contemporáneas que han dejado su huella en la cultura, la ciencia, el deporte o la educación.
El recorrido urbano se convierte así en una herramienta de memoria y aprendizaje, permitiendo a vecinos y visitantes descubrir la biografía de mujeres que, con su talento y esfuerzo, han contribuido al progreso social y a la igualdad de oportunidades.
De Montserrat Caballé a Margarita Salas
Entre los nombres que ya forman parte de este callejero se encuentran personalidades como la soprano Montserrat Caballé, la escritora Rosa Chacel o la científica Margarita Salas, todas ellas reconocidas internacionalmente por su legado. El objetivo es que cada calle sea, además de un espacio de tránsito, un recordatorio de la importancia de estas mujeres en la historia.
Mujeres vinculadas al municipio
La propuesta también tiene un fuerte arraigo local. Figuras como Carmen Hernández Guarch, profesora y exdirectora del Colegio Julio Pinto, o la artista Martuchi, nombrada Mujer Esencial en 2017, se suman a este recorrido, representando el talento y la entrega de vecinas que han marcado la vida cultural y educativa de la ciudad.
Referentes deportivos y ejemplos de superación
El callejero no olvida tampoco a mujeres del ámbito deportivo. Nombres como Laura Oter o Keka Vega aparecen ahora en el plano urbano como modelos de esfuerzo y superación, reforzando la diversidad de disciplinas que se ponen en valor.
Una herramienta pedagógica y un compromiso con la igualdad
“Queremos visibilizar la contribución de las mujeres, a menudo olvidada por la historia, y que hoy reconocemos a través de nuestros espacios públicos”, señaló la concejal de Familia e Igualdad, Sonia Lolo. “Este callejero es también una herramienta pedagógica para las generaciones presentes y futuras, y un reflejo de nuestro compromiso con la igualdad”.
La iniciativa se integra en las políticas municipales de equidad y diversidad, reforzando el mensaje de una ciudad que defiende el respeto y la convivencia. El Callejero con nombre de mujer convierte las calles en espacios de memoria, reconocimiento y aprendizaje compartido.